Para aquellos que sufren de dolor de espalda, cocinar en casa puede parecer una tarea desalentadora. Sin embargo, hay varias estrategias para adaptar la cocina y hacerla más accesible.
Preparación y Organización
Utiliza el concepto de «mise-en-place», que implica reunir todos los ingredientes y herramientas necesarios antes de comenzar a cocinar. Esto puede reducir la cantidad de movimientos y el tiempo de pie.
Además, usar un carrito con ruedas puede ayudarte a mover los objetos pesados sin cargar tu espalda.